Entre mis 12 y mis 13 años fui abiertamente invitado a estar presente en la proyección de una película pornográfica. Así es, dejen de lado el internet y los discos, retrocedamos 12 años en el tiempo y recordemos esos vhs sin rotulo, que contenían imágenes y música propias de decada y media para atrás. Si, para atrás lo único que hay es tiempo.
De regreso a mi historia, un amigo nos invitó a mi, a mi hermano y a otro amigo a participar de la proyección de este videocassette.
Y bueno. Si alguien recuerda aquel soundtrack de los años maravillosos, es hora de ponerle play en su cabeza.
Y ahí estaba yo, en una casa sin padres, sentado en el suelo en compañia de mi hermano y esos dos entrañables amigos. Viendo en la televisión una toma muy muy MUY cerrada que me mostraba por primera vez en mi vida un pene entrando y saliendo una y otra vez de una vagina.
El espactáculo, por demás impactante, me provocó de todo menos una erección.
Somo tan tibios
Hace 12 años
No hay comentarios:
Publicar un comentario